Liverpool viaja a Milán para enfrentar al Inter con Salah en el centro de la controversia
El Liverpool pone en juego gran parte de su porvenir en competiciones europeas este martes en Milán contra el Inter, en un momento de mala racha de resultados y con el egipcio Mohamed Salah en el foco de las críticas después de manifestar abiertamente su descontento hacia el club inglés.
Después de permanecer en el banquillo por tercera vez seguida el sábado ante el Leeds (3-3), la estrella egipcia desató un conflicto interno al reconocer que su vínculo con el técnico Arne Slot se ha deteriorado por completo.
"Me siento muy decepcionado. He contribuido enormemente a este equipo durante años, sobre todo en la campaña anterior", afirmó El Faraón en Elland Road.
"Ahora me dejan en el suplente y no comprendo el motivo. Da la impresión de que el club me ha expuesto a las críticas. Esa es mi percepción. Está evidente que alguien pretendía que asumiera toda la responsabilidad" por el arranque tan flojo de la temporada, con apenas cuatro triunfos en los últimos 15 encuentros de todas las competiciones.
De ídolo a suplente
Salah, que desde su llegada a Anfield desde la Roma en 2017 se erigió en una figura legendaria del Liverpool, ha aportado 250 tantos (tercer máximo anotador histórico del club) a los dos campeonatos de Premier League (rompiendo una sequía de más de 30 años en 2020) y una Liga de Campeones (2019).
Tras una sobresaliente temporada pasada (34 goles y 23 pases gol en 52 partidos en todas las competiciones), Salah extendió su contrato a los 33 años por dos temporadas con un acuerdo generoso.
Sin embargo, esta campaña solo registra 5 goles y tres asistencias en 19 encuentros, cifras discretas que han ido de la mano con los pobres desempeños del Liverpool, que ocupa el octavo puesto en la Premier League a 10 puntos del Arsenal líder y está fuera del Top 8 en la Champions.
Slot ya había excluido a Salah del once inicial en los duelos de Champions ante Galatasaray y Eintracht, aunque lo mantuvo como titular en la liga durante los primeros 12 partidos, hasta la derrota 3-0 frente al Nottingham Forest, lo que agoto la tolerancia del entrenador holandés.
El Liverpool fue el club que más gastó en incorporaciones el verano pasado en el hemisferio norte, invirtiendo más de 400 millones de dólares solo en tres atacantes: Florian Wirtz, Hugo Ekitike y Alexander Isak.
A pesar del inicio irregular de Wirtz e Isak, Slot los ve como el porvenir del equipo, lo que ha generado un enfrentamiento entre el técnico y el delantero egipcio.
"Me hicieron numerosas promesas en verano, y desde hace tres partidos soy suplente, por lo que no puedo afirmar que hayan cumplido", se quejó Salah.
"Sin vínculo con Slot"
"Lo he mencionado en varias ocasiones antes, que mantenía una buena conexión con el entrenador y de pronto no existe ninguna", agregó.
Su próxima participación en la Copa de África de Naciones ha llevado a Slot a planificar con los efectivos disponibles hasta después de Navidad, incluyendo la fase clave de la Liga de Campeones.
Frente al Brighton el próximo fin de semana, "estaré en Anfield para despedirme de la afición antes de partir a la Copa de África, ya que no sé qué ocurrirá", comentó a los medios el sábado.
Si decide dejar Anfield en enero, los rumores apuntan al egipcio, emblema del balompié árabe, hacia la Saudi Pro League por una suma considerable, que posibilitaría al Liverpool recuperar parte de la inversión veraniega.
Pero el respaldo a Slot tras su exitosa primera temporada, con el reto extra de reemplazar a Jürgen Klopp en el banquillo, parece haber mermado entre los seguidores del Liverpool y cualquier decisión podría alterar la posición de Salah.
La presión es altísima antes del viaje a Milán para medirse al Inter este martes. Si no logran la victoria, el Liverpool quedaría virtualmente eliminado de la clasificación directa a octavos y la crisis del equipo se profundizaría aún más.