Deschamps: adaptarse a la nueva generación es clave para evitar ser calificado como un "viejo idiota"

Deschamps: adaptarse a la nueva generación es clave para evitar ser calificado como un "viejo idiota"

En una entrevista concedida a la AFP, el entrenador francés Didier Deschamps explicó que ha debido ajustar su método para integrar a la actual generación de futbolistas jóvenes, evitando imponer sus criterios de manera rígida con el fin de no terminar siendo un "viejo idiota".

El técnico de 56 años, campeón mundial tanto como jugador en 1998 como como entrenador en 2018, confirmó que dejará el cargo después del Mundial de 2026, tras completar 12 años al frente de la selección.

Durante su trayectoria, Deschamps ha notado cambios significativos en la forma de actuar y en la personalidad de los jugadores más jóvenes.

"La nueva camada muestra una confianza y seguridad propias que antes no existían", expresó a la AFP previo a los encuentros clasificatorios para el Mundial ante Azerbaiyán el viernes e Islandia el lunes.

"Antes, los jóvenes aceptaban sin cuestionar las instrucciones recibidas. Hoy, debido a su temprana preparación y experiencia, son más independientes y maduros. Muchos incluso inician su carrera en el extranjero a muy temprana edad".

Según Deschamps, mientras que hace una década bastaba con ser convocado para sentirse realizado, actualmente los jugadores aspiran a más, lo que exige a los entrenadores modificar su forma de interactuar con ellos.

"Es similar al ámbito laboral: un joven puede llegar y manifestar directamente a su supervisor que busca su posición".

"Esto puede interpretarse tanto como audacia como falta de respeto".

"Lo importante es que me presten atención"

Aunque reconoció que "ciertos principios funcionaban mejor en el pasado", admitió que "ya no son aplicables hoy", como la prohibición de dispositivos móviles en los vestuarios.

"Esta generación crece inmersa en la tecnología, prácticamente con un teléfono en sus manos desde pequeños", indicó.

Por ello, "mi labor es adaptarme a sus necesidades", subrayó Deschamps.

El técnico destacó también que la capacidad de enfoque de los jugadores más jóvenes es "menos desarrollada", lo que le obliga a replantear sus sesiones de entrenamiento.

"Me concentro en ser claro y directo", aseguró, "pues prefiero que entiendan mis mensajes antes que convertirme en un murmullo sin importancia. Al trabajar con generaciones sucesivas, se trata de mantener el equilibrio entre no ser un "viejo idiota" ni un "joven fingido"".