Dembélé, una asunción de responsabilidad premiada con oro
Tras la salida de Kylian Mbappé hacia el Real Madrid, el PSG parecía enfrentar un vacío enorme. No obstante, surgió la figura de Ousmane Dembélé, hasta ese momento limitado por lesiones y opacado por otras estrellas, quien tomó las riendas y ha recibido como premio el Balón de Oro.
Durante años criticado por su inmadurez, fragilidad física y falta de precisión frente al gol, Dembélé avanzó para guiar al PSG hacia la gloria en Europa y se convirtió este lunes en el sexto francés en alzarse con el codiciado trofeo individual.
Este reconocimiento culmina la excepcional campaña 2024-2025 de 'Dembouz', galardonado como el mejor jugador de la Ligue 1 y de la Liga de Campeones.
El exfutbolista del FC Barcelona logró incorporar a su estilo desequilibrante una exactitud inédita en el remate, evidenciada en sus 35 goles en 53 encuentros de todas las competiciones (Ligue 1, Liga de Campeones, Copa de Francia, Mundial de Clubes y Supercopa de Francia).
Superando con creces su anterior tope de 14 goles en 2018-2019 con el Barça, Dembélé, que ahora padece una lesión en el muslo, completó de manera indiscutible la mejor temporada de su trayectoria.
En el invierno europeo pasado, el extremo ambidiestro anotó hat-tricks consecutivos frente al Stuttgart en Champions y ante el Brest en Ligue 1, marcando el comienzo de su camino triunfal hacia el Balón de Oro.
Simplemente extraordinario
"Realizó una temporada excepcional, efectivo en el gol, pero al considerar todo lo que contribuye en el campo en la creación de jugadas, sus aportes defensivos, es simplemente extraordinario", opinó su compañero en el PSG Désiré Doué.
En realidad, más allá de sus cifras, su impacto en el partido resulta clave para el PSG triunfador, actuando como falso nueve, con roles de mediapunta y delantero, posición que le asignó su entrenador Luis Enrique.
"Yo otorgaría el Balón de Oro a Ousmane Dembélé, solo por su forma de defender", afirmó el técnico español tras el título en Múnich contra el Inter de Milan (5-0).
Dembélé releva a Karim Benzema en 2022, a Zinédine Zidane en 1998, y a Raymond Kopa, Michel Platini y Jean-Pierre Papin como los franceses que han sido elegidos los mejores del mundo.
El Balón de Oro es "el grial", había comentado Dembélé al diario Le Monde a fines de agosto.
Y lo ha conseguido en su debut entre los 30 nominados finales.
Desde su incorporación a París en el verano de 2023, Dembélé ha ascendido en la estructura del equipo parisino.
Documentales y Aznavour
Calificado por Luis Enrique como "el jugador más desequilibrante" del planeta, se erigió en la estrella ofensiva del conjunto por indicación de su preparador en el verano de 2024, después de la partida de su amigo Kylian Mbappé al Real Madrid.
Sin embargo, este avance no se debe únicamente a su entrenador.
El jugador originario de Vernon, en Normandía, quien se crio con su madre y cuatro hermanos en el barrio obrero de la Madeleine en Evreux, a una hora en auto de París, cuenta actualmente con un equipo de expertos a su alrededor.
Un entrenador físico, un nutricionista, un analista de vídeo, pero especialmente su agente Moussa Sissoko y su leal amigo de la infancia Moustapha Diatta, le han apoyado para ganar confianza, reducir lesiones mediante un estilo de vida más tranquilo.
El ex del Rennes, de complexión no muy robusta, ha modificado su enfoque en el juego, con menos sprints y regates, priorizando pases y aprendiendo a posicionarse óptimamente para marcar.
En el vestuario "soy el bromista con todos", relata Ousmane Dembélé, frecuentemente con una sonrisa mientras sus compañeros lucen expresiones serias y enfocadas.
Fanático de la moda, del intérprete Charles Aznavour, pero también de documentales sobre animales o historia, Dembélé es padre de una hija de ocho años. Se le describe como hogareño. Ahora tendrá que hacer espacio en su casa para un Balón de Oro.