Robinho abandona la prisión de celebridades y pasa a otro penal
El exjugador de fútbol brasileño Robinho, quien purga desde 2024 una sentencia de nueve años de prisión por un delito de violación en grupo, fue movido el lunes al penal de Limeira, situado en el interior de São Paulo, después de que surgieran quejas sobre supuestos favores en su lugar anterior de reclusión, según confirmó la AFP.
Con 41 años, Robinho salió de Tremembé, un conjunto carcelario a unos 150 km de la capital paulista, famoso por albergar a "la cárcel de los famosos". Las autoridades brasileñas acostumbran destinar ese sitio a personas condenadas por delitos graves o con notoriedad pública, como Edinho, hijo de Pelé, quien estuvo allí por tráfico de drogas hasta su liberación en 2017.
La Secretaría de Administración Penitenciaria notificó en un comunicado dirigido a la AFP que el antiguo delantero "ingresó" en el Centro de Resocialización de Limeira.
"El movimiento ocurrió por solicitud de la defensa del recluso", se indica en el documento.
Dicha petición data de octubre, momento en que medios locales destacaron presuntos privilegios que disfrutaría Robinho en Tremembé, algo que él mismo desmintió.
En los primeros días de septiembre, el tribunal supremo de Brasil denegó una apelación de su equipo legal que pretendía su puesta en libertad.
La condena de Robinho se relaciona con la violación grupal a una mujer albanesa en 2013, ocurrida en una discoteca de Milán durante su etapa en el AC Milan.
Los tribunales italianos lo sentenciaron en 2017, y la resolución se hizo definitiva en 2022.
En marzo de 2024, la máxima corte brasileña validó esa sentencia y dispuso su encarcelamiento inmediato.
En ese entonces, el exdeportista se presentó ante las autoridades.
Italia utilizó pactos internacionales con Brasil, ya que la Constitución del país sudamericano impide extraditar a sus nacionales.
Robinho mantiene su inocencia.