Fútbol para Dummies: guía para comprender el complicado fútbol argentino
A partir de 2026 habrá ocho trofeos en juego, una liga de primera con treinta equipos compitiendo y sistemas que desconcertarían al propio Albert Einstein. Y encima, lo previsto puede variar en cualquier momento. Bienvenidos al fútbol argentino.
Incluso los compatriotas de Diego Maradona y Lionel Messi se pierden con el modo en que funciona su balompié, el cruce de un país dividido y con graves dificultades económicas.
Y no es para menos, porque de una semana a la siguiente, los clubes pueden pasar de jugar el torneo de seis meses (similar a una liga) a la Copa o a la Supercopa, y tal vez después a la otra Supercopa. Sí, existen dos Supercopas.
"Nadie lo capta del todo, porque todo se transforma constantemente. La sola explicación es la acumulación de influencia por parte de los directivos", explica a la AFP el periodista Andrés Burgo, quien ha escrito varios libros acerca del fútbol argentino.
El último cambio ha dejado boquiabierta a una afición ya habituada a las ocurrencias de sus líderes, que han excusado estos ajustes como tácticas comerciales y deportivas para impulsar la venta de futbolistas.
El jueves, la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) proclamó Campeón de Liga al Rosario Central de Ángel Di María. Lo reconoció por haber sumado los puntos más altos en la tabla acumulada, que integra las posiciones de los dos torneos semestrales.
Esta resolución no figuraba en el reglamento y originó una queja de Estudiantes, que se medirá al Canalla el domingo en octavos de final de uno de los múltiples campeonatos, el Clausura.
Los futbolistas del Pincha, que los apeó por 1-0, les dieron la espalda a sus adversarios en el clásico pasillo para el campeón.
Entresijos del fútbol "Frankenstein"
Tras levantar el trofeo la semana pasada, el presidente de Central, Gonzalo Belloso, opinó que la multiplicación de competiciones se debe a un fútbol "muy inclusivo", que brinda chances a equipos grandes y pequeños.
Con el agregado del Campeón de Liga, el fútbol argentino entregará al menos ocho títulos en 2026, el año en que la Albiceleste de Messi defenderá su título en el Mundial de Norteamérica.
Al Campeón de Liga se unen el Apertura, el Clausura, la Copa Argentina, la Supercopa Internacional, la Supercopa Argentina, el Trofeo de Campeones y la Recopa de Campeones.
"De momento, ja", se burla Burgo.
El anuncio de la Recopa se hizo el mismo día en que Central logró ese título imprevisto, el primero para Di María desde su vuelta al país en mayo.
¿Quiénes participarán en ella? Los vencedores de la Copa Argentina, la Supercopa Argentina y la Supercopa Internacional.
¿Pero quiénes acceden a la Copa y las Supercopas?
Para la primera las cosas son sencillas, ya que sigue el modelo internacional: los treinta clubes de la máxima categoría, un número bastante superior a los 18 o 20 de las grandes ligas mundiales, más equipos de divisiones inferiores.
Con las Supercopas empiezan los enredos de lo que algunos llaman un fútbol "Frankenstein".
La Argentina enfrenta en un solo partido a los campeones de la Copa y del Trofeo de Campeones, en tanto que la Internacional lo hace al equipo con más puntos en la tabla anual, que desde el jueves se denomina Campeón de Liga, y al ganador del Trofeo de Campeones.
Críticas al nivel
¿Cómo se obtiene el Trofeo de Campeones? Vencedor del Apertura o del Clausura, y luego superando en una final al triunfador del otro torneo semestral.
El esquema de dos torneos de medio año es habitual en Sudamérica, aunque el argentino, como es lógico, incorpora sus particularidades, como un descenso basado en el promedio de puntos.
Los treinta clubes de primera, un total fijado en 2014, se reparten en dos grupos de quince. Después de una fase regular con dieciséis encuentros, los ocho primeros de cada zona pasan a playoffs hasta la final.
"Es un lío total (desorden). Antes solo había dos (torneos, Clausura y Apertura), veinte equipos, todo era simple", comenta a la AFP Tomás Menconi, un seguidor de River Plate de 33 años. Ahora "es imposible seguirlo. Los títulos nacionales cada vez importan menos".
La abundancia de torneos y equipos se ve como la razón del presunto bajo nivel del fútbol argentino, cuyos clubes no conquistan la Copa Libertadores desde 2018.
"Nuestra competición no es una liga elitista: es accesible, disputada y formadora", defendió Claudio "Chiqui" Tapia, presidente de la AFA desde 2017, la semana pasada en X.
El directivo admitió en abril posibles errores en la comunicación para aclarar el objetivo de incrementar los equipos en las competiciones, una medida que ya se usa en el Mundial y la Liga de Campeones de Europa.