Un gran sorteo para el Mundial 2026 destacando a Trump como estrella principal
El sorteo del Mundial 2026, programado para este viernes a las 17H00 GMT en Washington, representa el inicio de un torneo de gran envergadura que se celebrará en Estados Unidos, México y Canadá, con Donald Trump como presencia constante.
En un evento de casi dos horas, los organizadores han planeado un espectáculo completo en el Kennedy Center, un majestuoso auditorio en la capital de Estados Unidos, para definir el camino de los 48 equipos que buscarán suceder a la Argentina de Lionel Messi, campeona en Qatar 2022.
Bocelli, Village People, Robbie Williams...
Con presentaciones de artistas de distintos estilos musicales como Andrea Bocelli, Village People, Robbie Williams o Nicole Scherzinger, esta ceremonia principal, presentada por la exmodelo alemana Heidi Klum y el comediante Kevin Hart, una figura destacada en Estados Unidos, busca establecer el ambiente de una competencia única.
Sin embargo, el invitado principal será, indudablemente, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
El empresario republicano, quien volvió a la Casa Blanca en enero, ha hecho de la Copa del Mundo un elemento clave en su segundo periodo, a pesar de las inquietudes por sus posiciones adversas hacia México y Canadá, su enfoque en inmigración o sus advertencias de apartar sedes de partidos en ciudades controladas por demócratas.
Trump ha hallado un socio importante en Gianni Infantino, presidente de la FIFA, con quien mantiene una relación fluida.
El líder italo-suizo, que asistió a su toma de posesión y ha visitado en varias ocasiones la Oficina Oval, ha entendido la importancia de aliarse con el gobernante estadounidense, sede de 78 de los 104 encuentros del 11 de junio al 19 de julio de 2026, incluyendo la final en el MetLife Stadium de Nueva Jersey.
Premio de la Paz
Esta afinidad, fomentada con cuidado por ambos en pro de intereses compartidos, alcanzará su punto máximo el viernes, con la entrega a Trump, según diversas fuentes, del primer Premio de la Paz de la FIFA.
Un galardón simbólico emitido en vivo a nivel global para el mandatario estadounidense, que presume de haber resuelto varios conflictos desde su retorno al poder y aspira abiertamente al Premio Nobel de la Paz, concedido este año a la opositora venezolana María Corina Machado.
"El fútbol promueve la paz, y en representación de la amplia comunidad futbolística, el Premio de la Paz de la FIFA honrará los significativos aportes de personas que unen a la gente y generan esperanza para las próximas generaciones", afirmó Infantino el 5 de noviembre al anunciar esta nueva distinción en Miami, bajo la atenta mirada de Trump.
Como coanfitriones, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, y el primer ministro de Canadá, Mark Carney, han asegurado su asistencia a pesar de las fuertes fricciones por los impuestos arancelarios del líder estadounidense, quien ha repetido su intención de integrar Canadá como el estado 51 de Estados Unidos.
Aun Irán, con relaciones diplomáticas interrumpidas con Estados Unidos desde 1980, finalmente enviará una delegación reducida liderada por el entrenador Amir Ghalenoei, tras declarar inicialmente que boicotearía el evento por la negativa de visados a varios miembros de su grupo.
Los detalles se conocerán el sábado
En el plano deportivo, el reto es notable para los 42 países ya clasificados, que se unirán en marzo a seis equipos de la repesca para completar los 48 participantes, una innovación en la historia de la Copa del Mundo.
Al finalizar el sorteo, donde intervendrán íconos del deporte estadounidense como Tom Brady, Shaquille O’Neal o Wayne Gretzky, se revelarán los cruces de la fase inicial y la formación de los 12 grupos de cuatro equipos, pero los estadios y horarios de los partidos se anunciarán el sábado.
Una medida adoptada por la FIFA para "asegurar las óptimas condiciones para todos los equipos y aficionados, permitiendo que los seguidores globales vean a sus selecciones en vivo pese a las variaciones horarias".
Otra novedad: las cuatro primeras en el ranking FIFA (España, Argentina, Francia e Inglaterra) se colocarán en secciones distintas del bracket y no se cruzarán antes de las semifinales si lideran su grupo, con el objetivo de asegurar "equidad deportiva", según el máximo organismo del fútbol.